Iniciar nuestra andadura en internet puede suponer un proceso tedioso si no estamos familiarizados con algunos conceptos que nos pueden facilitar el camino hacia los objetivos de nuestra marca. Conceptos como SEO y SEM nos permiten marcar la ruta a seguir, más allá de abrir un sitio web y empezar a publicar contenido. Pero ¿de verdad sabemos todo lo que necesitamos saber sobre ellos? ¿En qué se diferencian? ¿Cómo puede, cada uno de ellos, ayudarnos? Veamos algunos factores importantes de estas dos estrategias.
SEO y SEM: ¿Qué significan?
SEO y SEM son dos estrategias de marketing que poseen como objetivo aumentar el éxito de una determinada página web. Estas estrategias permiten aumentar posiciones en los buscadores más importantes, aumentando a su vez la visibilidad del sitio online. Gracias a ello, aumenta el tráfico generado, así como las interacciones, conversiones, y, en última estancia, los beneficios. Una página web con un adecuado SEO y SEM posee más posibilidades de conseguir sus objetivos en un menor periodo de tiempo que otro sitio web que no le otorgue importancia a este tipo de estrategias.
Por ello, estas estrategias se convierten en las aliadas de todo experto en marketing online, así como de todo aquel que desee iniciarse en este ámbito. Saber diferenciarlas y aplicarlas es fundamental para poder sacar todo el jugo que nos pueden dar.
¿Qué es el SEO?
SEO (Search Engine Optimization) recopila una serie de estrategias especialmente creadas para interferir sobre los motores de búsqueda más importantes. Todas ellas permiten optimizar una determinada página web con el objetivo de incluirla entre sus páginas de búsquedas. Un SEO trabajado permite aumentar posiciones en los buscadores, de manera que la página web pueda ir escalando resultados hasta situarse en los primeros puestos.
Un internauta que realiza una búsqueda por internet puede obtener miles de resultados. No obstante, los primeros de ellos son los que consiguen captar su atención. Aquí radica la importancia de escalar posiciones en los buscadores para poder beneficiarnos de un gran número de visitas. Y, para ello, las estrategias SEO son fundamentales.
¿Qué estrategias debemos implementar para optimizar nuestro SEO?
Mejorar nuestro SEO implica trabajar en un conjunto de técnicas, con el objetivo de aumentar la presencia de nuestra página web en buscadores. Algunas de las ellas son:
- El uso de palabras clave o keywords: Las palabras clave son esenciales para facilitar que otras personas encuentren nuestra página web, y se interesen por ella. Se trata de palabras que generan interés y que se encuentran en el contenido de un determinado sitio web. Elegirlas a conciencia permite visibilizar nuestra página y/o blog, pues son los términos que usan los motores de búsqueda para seleccionar qué páginas mostrar.
- Segmentar nuestro público objetivo: Saber a qué público nos dirigimos nos permite saber dónde publicitarnos y conseguir mayores beneficios. Esto implica crear, previamente, un buyer persona, y filtrar los canales de publicidad que vamos a usar. Mostrar nuestra página web a nuestro público objetivo nos permitirá ahorrar recursos y optimizar los resultados.
- Crear contenido de calidad: La creación de contenido es uno de los factores más importantes para generar un SEO adecuado. Un contenido de calidad es aquel que aporta información útil, que posee una buena redacción y una cantidad adecuada de recursos visuales (imágenes y vídeos). Por supuesto, la información debe ser contrastada y veraz.
- Presencia en redes sociales: Las redes sociales son el escaparate para muchas empresas y/o marcas, pues permiten llegar a un público objetivo amplio y en el menor tiempo posible. Esto ha generado numerosas estrategias de Social Ads, con resultados comprobados.
¿Qué es el SEM?
El SEM (Search Engine Marketing) es una estrategia destinada a aumentar la posición de una determinada página web en los resultados de los buscadores. De esta manera, SEM y SEO comparten una misma finalidad; su diferencia radica en la manera de conseguirla.
En este caso, la presencia en buscadores se consigue mediante pago directo de publicidad. Se trata de la contratación de anuncios en un determinado buscador, y aunque supone un cierto desembolso económico, ofrece resultados más inmediatos que los que podemos conseguir mediante el SEO.
A través de los banners y enlaces, el SEM ofrece aparecer en los primeros lugares de los motores de búsqueda, con el fin de atraer un mayor número de visitas. Además, esta estrategia se nutre también de los clicks generados, actuando como feedback y mejorando, a su vez, su posicionamiento principal.
¿Cómo optimizar nuestro SEM?
Existen dos plataformas principales en las que contratar publicidad y mejorar, de esta manera, nuestro posicionamiento en buscadores: Google Adwords y Google Shopping.
Google Adwords es la plataforma más conocida y usada, gracias a su sencillez y a sus resultados. Cualquier página web puede contratar sus servicios, apareciendo al instante en lugares destacados de los resultados orgánicos de búsqueda. La cantidad de clicks contratados generará el precio económico que deberemos asumir para poder beneficiarnos de las ventajas que nos ofrece el SEM.
Google Shopping es la plataforma enfocada, principalmente, a negocios online de venta de artículos. Su contratación genera pequeñas imágenes con algunos datos sobre el producto (nombre descriptivo y precio), que enlaza a la tienda online. Se muestran en la primera página de resultados, en posiciones destacadas.
El SEM posiciona nuestra página web en un lugar destacado, con la finalidad de absorber el mayor número de visitas. Es, por tanto, un facilitador del éxito de nuestra marca.
De esta manera, SEO y SEM comparten la misma finalidad, aunque los caminos para conseguirlo son diferentes. No obstante, los dos se complementan a la perfección, por lo que pueden ser nuestros aliados a la hora de conseguir un mayor éxito online.
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